Multacar: La revolución en multas del Ayuntamiento de Madrid

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By Ana Vargas

Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) han incrementado la presión de los ayuntamientos sobre los conductores, especialmente en Madrid, donde se ha implementado el sistema Multacar. Este sistema, creado por la empresa Deltacar, ha generado sorprendentes cifras de multas anuales, superando incluso a la Dirección General de Tráfico (DGT).

Madrid factura al año casi 200 millones de euros en multas sobre un parque de dos millones de vehículos, mientras que la DGT facturó el año pasado 440 millones de euros pero sobre un parque móvil de 35 millones de coches. Esto significa que en la capital se ponen unos 100 euros de multa por vehículo al año, mientras que la DGT se queda en menos de 15 euros.

Los vehículos Multacar están equipados con hasta una decena de cámaras en el techo, permitiendo grabar en un ángulo de 360 grados. Al detectar una infracción, se comunica al copiloto mediante una tablet, quien procede a tramitar el expediente sancionador. Posteriormente, el alcalde firma el expediente, ya que el personal encargado de manejar estos dispositivos no es agente de policía y no tiene potestad para sancionar.

Existen dos tipos de vehículos Multacar en el Ayuntamiento de Madrid: los del servicio de Estacionamiento Regulado (SER) y los del Servicio de Apoyo al Control de Estacionamiento (SACE). Los primeros patrullan las zonas de aparcamiento de pago, identificando matrículas para encontrar coches que hayan excedido el tiempo permitido o que no tengan tique. Además, controlan otras infracciones como coches mal aparcados o en doble fila.

El sistema de lectura de matrículas también permite informar a la policía si se encuentra un coche robado o involucrado en algún delito, todo ello apoyado en el posicionamiento GPS para informar de la posición del vehículo.

Los vehículos SACE, por otro lado, están a cargo de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) y tienen como misión principal encontrar y multar vehículos aparcados en el carril bus. También multan doble fila, problemas de documentación, ITV e incluso seguros, de manera similar a cómo actúan los vehículos de la zona SER.

En ambos casos, se toman varias fotos de los infractores que se adjuntan al expediente. La tecnología de Multacar permite multar en los dos sentidos, hasta 15 metros de distancia y procesar hasta 25 sanciones por minuto, una cifra impresionante.

La implementación de Multacar en Madrid demuestra cómo la tecnología y la innovación pueden cambiar la forma en que se aplican las multas en la ciudad. Aunque la presión sobre los conductores ha aumentado, estas medidas buscan mejorar la calidad del aire y la movilidad urbana.

También en este tipo de medidas se refleja el compromiso de las autoridades con la seguridad vial, especialmente cuando en los últimos días, han ocurrido varios accidentes de tráfico en el territorio español que han dejado víctimas fatales. Los vehículos Multacar son un recurso que obliga a los conductores a prestar atención a las leyes de tránsito terrestre, y preocuparse por cumplirlas.

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